miércoles, 4 de marzo de 2009

La crisis devora televisión


En época de crisis económica, como la que atravesamos, los afectados se cuentan por millones. Un sector al que la crisis ha tocado de forma directa es el de la prensa. A lo largo de todo el país, desde El Mundo, El País o ABC, hasta los diarios regionales y locales, los directivos están recortando personal cada día, aunque apenas se habla de esto. Aquí podéis leer todas las negociaciones que se están llevando a cabo y que dejarán a miles de periodistas en la calle en los proximos meses.
Sin embargo, mientras los periódicos adelgazan a marchas forzadas, la televisión engorda de opulencia. Nunca, como en una crisis, se consume tanta tele. Según las estadísticas, cada persona consume al día hasta tres horas y media de televisión, un dato superior al de épocas pasadas:

"El fin de semana es el periodo donde más se notan los efectos de la crisis en los hábitos del espectador. El viernes, día de poco consumo de televisión habitualmente, ha visto cómo esta tendencia se ha invertido. Precisamente, el pasado viernes 17 de octubre, cada espectador pasó 222 minutos frente a su televisor, una media superior a la registrada en todo el curso: 213 minutos", según este diario on-line.

El otro día lo comentaban en un programa de radio, denostando a diestro y siniestro lo "perjudicial" de tanto consumo televisivo.
Ya sabéis que soy una defensora de la televisión, no sólo porque viva de ella, sino porque creo realmente en su función social. Que la gente consuma programas los sábados por la noche en lugar de salir a cenar a un restaurante no tiene por qué ser un plan peor. Es una lternativa de ocio más, gratuita y muchas veces formativa.
Pero lo mejor de la estadística es el apartado de reparto de clases sociales. Según los que hacen estos estudios, dependiendo de los ingresos de cada uno se consume un programa u otro:

"Dime lo que ganas y te diré lo que ves. Todos los estereotipos sobre clase social y gustos televisivos se cumplen si nos atenemos a los datos de audiencia de las últimas semanas.
Así, se evidencia que la clase alta prefiere la oferta de los canales temáticos (de pago), la programación de La 2 y opta por los contenidos de Cuatro. La clase media es asidua de los programas de Antena 3, Telecinco, Cuatro y La Sexta.
Los individuos pertenecientes a la clase Media-Baja se decantan por TVE-1 y Antena 3, mientras que los integrantes de la clase más desfavorecida pasan sus ratos de ocio entre TVE-1 y las autonómicas".
Atendiendo a estos datos, yo soy una persona de la clase 'más desfavorecida', ya que ocupo casi todo mi tiempo en TVE-1 y las autonómicas, por no decir las locales. Y no exiten ricos mirando telebasura ni pobres cultos interesados en La 2...

No hay comentarios: